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viernes, 7 de enero de 2011

LA PRIMAVERA DE BOTTICELLI

      A escena un grandioso cuadro pintado por el artista florentino con las grandes alegorías profanas mil años después de la caída del Imperio romano,  gracias a Bottichelli el occidente europeo recuperó las pinturas mitológicas de grandes dimensiones.

      Sandro Bottichelli nace en Florencia el 1 de marzo de 1445 en Florencia, Italia, hasta los catorce años no empieza su formación como aprendiz de orfebre hasta que en 1446 el padre a petición del niño le envia al taller de Fray Filippo Lippi, de éste pintor recibe sus mayores influencias en cuanto al control de formas  tridimensional, así como la delicada expresión de los rostros y un estilo íntimo hasta tal punto que sus primeras obras se le atribuyeron a su maestro.

     En 1467 frecuenta el taller de Andrea del Verrochio donde trabaja al lado de Leonardo da Vinci, para terminar teniendo su propio taller.

     Pinta " LA PRIMAVERA " una de sus obras maestras, aunque su datación es incierta se fija entre 1477 - 1482, temple sobre tabla de 750 cm x 425 cm en la actualidad se encuentra expuesta en la Galeríá  Uffizi, Florencia.

  

      Investigando aquí y allá en libros de pintura, he recopilado la interpretación de la obra que es " la pera " y que con gusto la pongo en el Buzón, de una manera sencilla de entender.

      Las nueve figuras están prácticamente al natural y en linea con lo cual resta profundidad, los personajes son perfectamente  identificables con la mitología griega y romana y relacionados con " la floralia " y con pasajes de los antigüos mitos.


      Empezamos de izquierda a derecha:


       El dios Mercurio despeja el cielo de niebla con su caduceo y corresponde a la mitología romana, queda identificado por sus zapatos con alas y lo pinta con colores intensos, porque es uno de los personajes principales de la obra.





     El grupo de las tres gracias servidoras de Venus deliciosamente enlazadas con las manos y en un paso de baile, es la imagen de la serenidad y de la concordia, casi desnudas con los cabellos peinados recogidos, pues solo las jóvenes solteras podían llevarlo suelto.
    


      Los sutilísimos velos crean una sensación de transparencia que lo logra porque deja las técnicas de la pintura flamenca, no aplica colores al temple esmaltados si no que sirviéndose del aceite de linaza como ligante superpone veladuras de color que deja ver el color que hay debajo






      Por encima de la figura de Venus vuela Cupido lanzando flechas de amor a Mercurio para enamorar a Venus.

        
    Venus se encuentra en el centro del cuadro, sirve de eje a la composición, su  clara figura contrasta con el fondo que es un tupido arbusto de color verde oscuro y la forma del mismo aporta la  impresión de que tiene una aureola.

     Está representada como una madona con cofia en el pelo, vestido y manto que cae asimétrico.
  



     Céfiro persigue a su prometida la ninfa Cloris en la espesura del bosque, que con el abrazo del viento primaveral se convierte en Flora y siembra el mundo de flores.  




    
     De la boca de Cloris salen flores que se acomodan en el vestido transparente de Flora.



      El prado florido que recoge toda la escena, contiene la descripción exacta de ciento cincuenta especies botánicas pintadas con exquisito detalle.        


                  
        Os comenté al principio que toda la interpretación del cuadro tenía " miga ", podríamos haberla ampliado más en profundidad en el capitulo de mitologías e incluso en la investigación literaria que tuvo que realizar Bottichelli  para construir este cuadro, pero pasaríamos al papel de los expertos en arte y de eso no se trata.

       Mi intención es meramente la de proporcionar información básica, para que conozcamos de que trata el contenido del cuadro  " LA PRIMAVERA"  de Botichelli.



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